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La consolidación del
MST esta mediada por luchas que fueron necesarias para reconocerse como sujetos
políticos con reivindicaciones en común, las cuales no serian exitosas a partir
de un trabajo individualizado. Una de las primeras conquistas de la tierra
según lo relata Harnecker (2000) fue en Macali, después de que una población
campesina fue expulsada del lugar de residencia tras la recuperación de la
tierra por parte de sus antiguos dueños, la comunidad indígena Kaigang de la Reserva
Indígena de Nonoai en 1978, seguida de otras experiencias como el campamento
situado en el Municipio de Ronda Alta, Rio Grande do Sul, más conocido como el campamento de
Encruzilhada Natalio en 1980, el cual contaba con 600 familias organizadas.
Entre las actividades que desarrollaban realizaron estudios para demostrarle al
gobierno que lo único que se requería para dar respuesta a su demanda era una
distribución justa de las tierras, a partir de este proceso se crea un boletín
informativo que más tarde se convirtió
en el periódico del MST. El gobierno intento de múltiples formas cooptar la
movilización ofertando proyectos de colonización que fueron rechazados, a lo
cual respondió con la instalación de una brigada militar con todas las
represiones que ello implica, en un intento fallido por desmovilizar los
campesinos, que dieron a conocer su lucha en muchas regiones, sumando adeptos a
la causa.
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El primer encuentro nacional del MST tuvo lugar del 20
al 22 de enero de de 1984 (Harnecker, 2002) donde se analizo la importancia de
adquirir un carácter nacional, reconociéndose como:
[…] un movimiento autónomo de masas que lucha por la tierra, por
la reforma agraria. No es ni un movimiento sindical ni un movimiento eclesial.
No debe depender ni de los sindicatos ni de las iglesias, sino que debe estar
controlado por los propios trabajadores para mantener su autonomía (Harnecker,
2002, p. 27)
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